CABO DE GATA

El Parque Natural del Cabo de Gata se encuentra en el sudeste de la provincia de Almería, ocupando parte de los términos municipales de Almería, Níjar y Carboneras;  fue declarado Parque Natural el 23 de Diciembre de 1987 y Reserva de la Biosfera en 1997.

Se extiende por una superficie de 37.000 Hectáreas terrestres y 12.000 de ámbito marino, formado por una franja de 1 milla de anchura.

La Sierra de Cabo de Gata, está considerada como el mejor y mayor exponente europeo de un macizo de origen volcánico; el Pico del Fraile con 493 m es su cota máxima.

El paisaje litoral en la zona oriental alterna escarpados acantilados, entibación de la Sierra, igualmente  de origen volcánico, con extensas playas y pequeñas calas; en la zona occidental las playas están separadas por las desembocaduras de las ramblas, delimitando además las salinas y la estepa.

Diversidad de recursos naturales se han explotado en el Parque, desde hace milenios; los fenicios en las Salinas de Cabo de Gata ya controlaron el agua del mar que entraba en las marismas y charcones naturales, con el fin de extraer la preciada sal. La pesca artesanal, dentro de los límites marinos del Parque es el modelo sostenible de explotar este recurso y la manera de preservar los fondos del mar. Los romanos extraían principalmente plata y alunita en Rodalquilar, pero fue al descubrirse vetas de oro, cuando estas minas tuvieron más relevancia; el pueblo minero de Rodalquilar  fue construido en el primer cuarto del Siglo XX y tuvo vida hasta 1966; en Agua Amarga se encuentra el que fuera cargadero de mineral de hierro, que transportado en ferrocarril procedía de Lucainena para ser embarcado; la pita, el henequén y la chumbera se extienden ampliamente por algunas zonas del Parque, pues se cultivaron extensivamente para obtener de las dos primeras fibras para fabricar cuerdas y tejidos, y de la tercera su fruto el higo chumbo.

La biodiversidad del Parque sorprende, más de 1000 especies vegetales se enfrentan a las condiciones adversas del clima, destacando endemismos tales como el dragoncillo del cabo, tomillo macho del cabo, aulaga mora y clavelina del cabo y entre el resto el azufaifo, barrón, palmito, pajín o triguillo del diablo, polaines, bolinas, albaidas, siemprevivas, esparto, romero, hinojo, matagallo, tomillo, perejil. Entre las aves destacar el flamenco rosado, avoceta, ortega o churra, alcavarán, cigüeñela, correlimos, cernícalo vulgar, mochuelo, águila perdicera, búho real, alondra de DuPont, cogujada montesina, abejaruco, gaviota reidora, gaviota patiamarilla, cormorán moñudo. Entre los mamíferos y reptiles el erizo moruno, lirón careto, musaraña, jineta, comadreja, tejón, zorro, jabalí, conejo, liebre, lagarto ocelado, víbora hocicuda; y entre otras especies el raro eslizón tridáctilo, sapo corredor, alacrán, escarabajo, mariposa,…En la zona marítima los aficionados al submarinismo pueden admirar los bosques de posidonia, cymodocea y zoostera, vegetales de origen terrestre que se han adaptado a la vida en el fondo del mar, en este hábitat también podemos contemplar a las herreras, serranos, salmonetes reales, pulpos; en aguas más profundas esponjas, gorgonias;  en fondos arenosos estrellas, cangrejos, erizos, besugos, galanes, lenguados  y a la nacra (especie de mejillón gigante); ocasionalmente alcatraces, atunes, lechas, peces luna, delfines, calderones, tortugas bobas,…

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